viernes, 28 de septiembre de 2018

Wiracocha


En el anclaje de los resplandores se estimulan hijos que nacieron fuera del matrimonio,
lejano mordisco de azar trivial que la masa recogió de colas emprendedoras
al tanto de orejas hermosas que tenían por revelar a huacos, similitud vaga,
los cerros que duermen con el temor rebosando esconden sus algas piedras
que se deshacen con el frívolo lenguaje de la década que oprime sus talones
en cuellos mustios de un ventarrón en escala de akros taripay.

El derroche de un Puno rebuscado en el tráfico de la sierra serena
celebrará con el mito de torneos que se practicaban en la academia de su filosofía
la acrópolis sincera de quienes viven sucumbidos en la comedia de senos montañosos
vistiendo a la pachamama de aromas floreados robados del valle,
la ciudadela al ras de la coca que siembran los corales de cuzcos desbocados,
es mítico huir de la plegaria del trueno eterno que en la cima correa... su abandono,
solo tres choclos despertarán en la atalaya de la pirámide
mencionando el taco sueco de los visitantes que desean sostener la gimnasia
que en el disco del cielo emite sonidos para aquellos que hicieron el amor mordiendo la rosa.

El ventilador descompuesto necesita un peine para sus hondas de carbón
se vendió el paisaje y ahora rinde culto más el material que su incapie veloz,
estupenda la idea de enfatizar la candela que muestra rostros
prendida del tronco azul que llamas violeta genera a perecederas moscas triunfantes
testigas del excremento y la venta de estos vientos que pesan oro
la melancolía de un hueso perdido en la respiración y en el ipsofacto.

Serendepia en agua de grasa, Viracocha.

Muchas canastas fueron arrojadas al río que soplaba el golem con sus ronquidos
y que iba a ser el alcalde que despertase tal embestida si con la apariencia apartaba
la ala del tiburón entre los árboles erectos del cuerpo levadizo esculpido.

Dicen esto... porque las maracas de la orquesta rodaron fragantes en el volumen
que se montaba sonora en las marchas de las hembras que tomaron el mazo
por el diploma de sus engreídos que en la ventana esperan el saco de arroz,
podrán surgir del barro los sobrevivientes para relatar los cuentos
que hallaban mientras tanto... al ojo de la amargues en su aro mondragon
pero la verdad esta en conducir la punta de la valentía
sólo así se podría regenerarse la sangre desperdiciada en las antenas del ballon,
cereza del cuadrilátero que se encarga de analizar el delfín constipado de hielo
que duerme durante la oratoria del pez aquél músculo de la vena cerebral.

En ese instante cambió la moneda trigueña del mercado carnívoro.

Julian


ESCRITO DE UN DESCONOCIDO

[PAPEL MOJADO/ROTO]

Soy tan pobre que ni lágrimas tengo.

Recuerdo el rojo de mi escuela y la pradera del resentimiento donde aún se aguarda en aqueste mundo.

La ferocidad se mostró en la familia mientras que el supuesto sentimiento amoroso lactaba mi quijada en la muchedumbre.

Soy tan pobre que la sonrisa me cuesta.

Pensar en los demás es la maldición... mis hermanos y madres en la mesa esperan la fruta secundaria del sudor de un futuro profesional.

                                       *

-¿Me permite?-
Dormir con ustedes esta noche, prometo ser caluroso.

-¿A los diecinueve años?-
los árboles enfermos podrán curar su cáncer.

-¿Tu padre?
la ignorancia murió ayer de una década vencida.

Soy tan pobre...