domingo, 5 de noviembre de 2017

Damisela

¿Como es que los peces aprendieron a tararear bajo el agua?

El viento pasmado se encoge como un óvulo 
que brinda oxígeno y vuelca su manto a la marina dilatada 
que escarcha sodio albo endulzando el galicismo de los seres 
que no supieron nadar como por supuesto este ente vivíparo 
que esta gestándo la secreción de la vida,
mala leche del simiente célico.

Hay que dar por hecho la esperanza de una gaviota 
que empeñe en su espionaje el sentido de morar.

El sabio quedara callado 
hasta el ultimo suspiro del globo celeste,
su deber fue no hablar y así lo hizo   
y ante cualquier llamado de la ignorancia
las explicaciones deberían quedarse quietas.


                                        
                                         ll



Existe una canción equinoderma que teje hora por hora  
la libidinosa condición de poder yacer,alguien que la oyó me lo comento.

Hoy mañana y siempre nadare y nadare contracorriente
pues no ha sido culpa mía haber nacido 
con el cuerpo deprimido. 

Me ha besado la intrepidez cuando volteaba a verles
en la ribera de la barba de la playa lila 
donde sientan la fe de manera soldadesca.

Ah, sepan que de tanto amor el amor ya no es amor,
las parlas arrojan esa verdad tan sincera 
como piedra al mar,los mapas desintegrados
mostraban un camino mejor para el velero ciego.
 












sábado, 4 de noviembre de 2017

Recostado en un roble del campo

¿Que paradoja esta apoyando este poema silvestre
que solo me recuerda a una arboleda celulosa
y no a mayólicas de cristal como piensa el poeta galán?


¿Que me esta causando tanta rabia
que babeo sonetos sin medida?


¿Cual es la mística que esconden
los sonidos de los huesos de mi pecho?



El hacha exquisito déjavu para los lápices, pequeños dedos de madera,
los monstruos escriben y oran a su manera y a la nada con justicia
como lloraría yo si no escribo y como lloro por dejar de escribir.



¡Maldita sea mil veces!

¡Mierda, mierda, mierda!
¡Mierda, mierda, mierda!
¡Mierda, mierda, mierda!
¡Mierda, mierda y más mierda!



Quiero saber cuando acaba esta mentada de madre que vive en mi mentón,
hoy no me identificaré con ustedes que se burlaron de mi tratándome bien
solo quiero blasfemar porque es una forma de agradecer a la existencia.


Ya mañana saldrá el sol por el mismo lugar de siempre y la luna buscara
también como siempre un atajo...


Y dime humano


¿Quieres ser sol o luna?



Decide, yo seguiré lustrando la franela pues disfruto haciendo cosas al revés.





viernes, 3 de noviembre de 2017

Clemente

La rima cayendo despacio por el torso del tronco
que al engrandecerse vuelve la voz de la hoja ronco
naciendo imperfecto en la quimera de los lechos
cuales sabanas rugen insatisfechos
no han devorado el calor últimamente
y lloran despavoridos diariamente.

El abrigo que embriaga la piel con abrazos ultravioletas
es el sufrimiento de un sol femenino en piernas quietas
los pasos de un carnívoro en escala violácea a hervir
la ecuación benigna de la musicalidad a morir
la métrica coqueta en plenilunio lánguido
en el Ávalon donde descansa el sueño placido.

Que cae de la cantimplora de un dulce poeta
la esperanza amarga del planeta
que beben los clementes y los bárbaros
la sangre meada a cántaros.

Pequeños cosas que decir
como bendecir
al que lea esto
y maldecir
al resto.